2000 - Clorindo
Testa, hoy
Clorindo Testa es un hombre que se comunica con sus semejantes por
medio de la pintura y la arquitectura y como todo verdadero artista esta
siempre dispuesto a innovar, arriesgándose por sobre todo valor
establecido.
Hoy, se presenta a los Concursos con la misma inquietud y
entusiasmo de su juventud, sometiéndose al criterio de los jurados como
uno más.
Sus arquitecturas sensibles, de resultados contundentes, se
independizan claramente de "aquellas otras" que adhieren a
"ondas" internacionales sin considerar circunstancias ni
contexto. En cada nueva entrega nos sorprende con todo su talento y
profunda comprensión humana, transportándonos a un mundo de espacios
alterados, llenos de color y tensiones, donde nos hace pasear por
imágenes que se proyectan desde lo mas profundo de sus sueños.
En el
mundo que nos propone: nada para explicar, todo para sentir y
emocionarse.
Busca y encuentra el arte en este oficio, lo hace indistintamente como
pintor, escultor, arquitecto y urbanista. En un tránsito que va del orden
a la libertad, del blanco y negro al color, del cuidado del detalle al
descuido intencional; su obra presenta una gran continuidad. Porque la
continuidad la determina el sentido que le va dando a las cosas y la
libertad que mantiene para actuar. Es cuestión de actitud. Testa no puede
hacer arquitectura como en los años 50. Hoy centra su interés en otras
cosas. En esta coherente evolución esta su continuidad.
Curioso y
observador, vuelve sobre sus recuerdos y los recrea sin nostalgia. Sin
aferrarse al pasado, comprende como pocos el paso del tiempo y el cambio
de las cosas.
Podemos decir, que es imprevisible -todo artista debe serlo- como tal
supera los limites y siempre aparece la sorpresa, lo incierto, lo
inesperado.... obligando a nuevas definiciones cuando se trata de busca
explicaciones.
El orden y la seguridad son valores muy arraigados en nuestra sociedad,
cuando cedan paso a la libertad, la obra de Clorindo Testa será
definitivamente aceptada.
Es cuestión de riesgo. A ser libre hay que
atreverse.
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